Los revolucionarios de todo el mundo somos hermanos.
Gral. José de San Martín
2 comentarios en «17 de agosto»
Merecido y oportuno reconocimiento al general padre de la patria grande, José de San Martin. Oportuno porque el momento histórico lo hace palpitar trascendente y actual en la voz y la acción del pueblo y dirigentes como Evo en Bolivia, Dilma en Brasil, Cristina en Argentina, Chavez en Venezuela, Correa en Ecuador, Pepe en Uruguay, Lugo en Paraguay, entre otros.
La Patria Grande que imaginó este revolucionario militar está mostrando algunos signos visibles de realización en unión y libertad. Pueblos enteros asumen su presente para dar muestra cabal de que es posible, a través de Unasur por ejemplo, pensarnos como una Gran Nación. «Yo soy del partido americano» solía responder a las insinuaciones de incorporarlo a algunos de los bandos en lucha.
Lamentablemente triunfaron los intereses portuarios y toda América Latina quedó de frente a los océanos y de espaldas al interior.
Esperanzador resulta observar los vientos de cambio que retoman, desde hace unos años a la fecha, la vocación latinoamericanista de José de San Martin y la reivindicación de lo propio, de lo autóctono, de lo telúrico, del interior, de lo popular en definitiva.
Gloria al hombre que puso su existencia al servicio del ideal emancipador contra los privilegios, la riqueza, el lujo y la entrega.
Merecido y oportuno reconocimiento al general padre de la patria grande, José de San Martin. Oportuno porque el momento histórico lo hace palpitar trascendente y actual en la voz y la acción del pueblo y dirigentes como Evo en Bolivia, Dilma en Brasil, Cristina en Argentina, Chavez en Venezuela, Correa en Ecuador, Pepe en Uruguay, Lugo en Paraguay, entre otros.
La Patria Grande que imaginó este revolucionario militar está mostrando algunos signos visibles de realización en unión y libertad. Pueblos enteros asumen su presente para dar muestra cabal de que es posible, a través de Unasur por ejemplo, pensarnos como una Gran Nación. «Yo soy del partido americano» solía responder a las insinuaciones de incorporarlo a algunos de los bandos en lucha.
Lamentablemente triunfaron los intereses portuarios y toda América Latina quedó de frente a los océanos y de espaldas al interior.
Esperanzador resulta observar los vientos de cambio que retoman, desde hace unos años a la fecha, la vocación latinoamericanista de José de San Martin y la reivindicación de lo propio, de lo autóctono, de lo telúrico, del interior, de lo popular en definitiva.
Gloria al hombre que puso su existencia al servicio del ideal emancipador contra los privilegios, la riqueza, el lujo y la entrega.
Gustavo Bassin